El Hotel Embarcadero de Calahonda apunta a lo mas hondo del horizonte mediterráneo, casi como si no quisiese saber nada de lo que pasa a su espalda, mete sus pies en la arena de la playa como de vacaciones eternas.
Esto le imprime una personalidad especial y privilegiada en toda la Costa del Sol, de la que se podrán beneficiar sus visitantes de forma exclusiva.